Fiel a una tradición ancestral, la imagen de San Miguel de Aralar paso nuevamente por Lerate, donde fue recibido por algunos feligreses.
En esta visita se comienza con el ritual de la bendición de los campos en las cuatro direcciones, bendiciones lau haizetara que no faltaron el martes dia14.



Un poco de historia
Antiguamente la finalidad de estas salidas era facilitar a los cofrades enfermos y que no podían subir hasta lo alto de Aralar para venerar su imagen. No en vano, llegó a contar con 40.000 hermanos. A partir de la mitad del siglo XIX, cuando el santuario perdió prados y bosques por la desamortización, este recorrido se convirtió en una fuente de ingresos importante.